PATRIMONIO DE GALICIA, CON MÁS DE 850 AÑOS
EN TIERRAS DEDICADAS AL CULTIVO DE LA VID.
Se sitúa entre dos ríos, el Outeiro y el Miño, que proporcionan una vista única sobre la vega de Francelos. Su origen data de la segunda mitad del siglo XII, siendo una referencia histórica desde entonces por su ubicación y elaboración de vino del Ribeiro de alta calidad.
SERVICIOS
Tierras de vino del Ribeiro, recuperadas con un cultivo de uvas autóctonas respetuoso con el medio natural, en un “terroir” con mucha historia y excelente ubicación y vistas sobre el río Miño.
Miel
Miel
con las mejores vistas al viñedo y al río Miño.
14 habitaciones con encanto propio, fruto de experiencias de los promotores en distintos lugares de España e Iberoamérica y
con las mejores vistas al viñedo y al río Miño.
Para eventos corporativos o sociales y preparados para invierno y verano.
Espacios exteriores e interiores, diseñados para organizar encuentros y celebraciones.
Para eventos corporativos o sociales y preparados para invierno y verano.
Recomendamos la mejor gastronomía
de la comarca, sobre la base del producto local de calidad y nuestra propia experiencia. Siempre buscando lugares con encanto.
Recomendamos la mejor gastronomía
de la comarca, sobre la base del producto local de calidad y nuestra propia experiencia. Siempre buscando lugares con encanto.
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ENTORNOLa comarca del RibeiroRibadavia, capital del Ribeiro y eje central de la comarca, aglutina en su municipio, cultura, historia y gastronomía. Localizada sobre los márgenes del río Avia en su desembocadura en el Miño, tiene uno de los cascos urbanos históricos más importantes de Galicia, conserva el castillo de los Sarmiento y la judería más completa de la comunidad, un museo etnológico para visitar y una plaza mayor para pasear y disfrutar de los productos de la villa.
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HISTORIADesde 1169 hasta hoyGranxa de Outeiro fue la primera Granja monástica del Monasterio de Santa María de Melón, referente social y económico en historia medieval de Galicia, para los habitantes de su entorno y de otras comarcas, pues sus dominios llegaban a Porriño, Vigo, al valle de Monterrey y a la frontera con Portugal.
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BODEGAEl viñedo y el vinoAlrededor de tres hectáreas recuperadas con siete variedades de uva blanca autóctona, en más de 30 bancales de tierra de sábrego, tratadas con procesos respetuosos con la naturaleza para elaborar un producto de alta calidad, como antaño lo fueron reconocidos los caldos de esta propiedad.
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INMUEBLESNuestros espaciosConstrucciones medievales restauradas, albergan los servicios ofrecidos dentro de un recinto de 6 Ha. amurallado. Dos antiguas bodegas medievales interconectadas, con espacio útil de más de 350 m2 en el interior y más de 1500 m2 en el exterior, se prestan para acomodar celebraciones y eventos. Además tenemos una capilla, consagrada y protegida, fuentes, escaleras, caminos, rocas y rincones únicos donde el agua fluye por sus cursos naturales, que disponen un entorno singular para un encuentro memorable.
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PRODUCTOSDa terraElaboramos con mucho cariño e ilusión dos productos: Vino y miel. Tras varios años de experimentación, disponemos de dos marcas elaboradas con uvas propias, investigando sus levaduras y creando un vino blanco joven, Francelus, y otro de guarda, Granxa d´Outeiro, que aspiran a la excelencia. Las colmenas en el Monte Grande, zona de bosque en la montaña que rodea el recinto, proporciona una miel de alta calidad producida de forma sostenible y ya disponible en dos formatos.
El primer granjero de Outeiro del que se tiene constancia documental es Fernando Pérez (Fernandus Petri, grangiarius de Outerio, ts.), que en 1211 confirma el testamento del caballero Juan Páez de Castrelo, que lo hace al marchar a la guerra contra los musulmanes.
Un lugar legendario, situado en la ladera de un valle denominado Paraíso, es un tesoro que con el paso del tiempo se vuelve a mostrar en su máximo esplendor.
El agua fluye por todos los rincones de esta increíble edificación medieval, dando vida al granito perfectamente trabajado y respetando su construcción tradicional.
La sobriedad, el emplazamiento, y el logrado maridaje con los elementos naturales con la historia del lugar, produce una experiencia sensorial única que recomendaría experimentar, por lo menos una vez en la vida.